No es nuevo que los estudios cinematográficos de todas partes del mundo son empresas que quieren ganar dinero. De ese modo, las decisiones que se toman en sus lujosas oficinas están más asociadas a maximizar sus ganancias que a dar un ejemplo de estética o innovación. Con la crisis económica los riesgos deben minimizarse y una de las fórmulas más abordadas es la de apostar a lo seguro. Es decir, a las sagas que, si bien no garantizan resultados en la taquilla, ya tienen públicos cautivos.
Desde personajes fantásticos como Batman o los vampiros de “Crepúsculo, pasando por los Navis de “Avatar”, de literatura como “Sherlock Holmes”, o de la propia factoría de Hollywood como “Indiana Jones”, irán apareciendo en la pantalla hasta 2014.
Aunque la estrategia no es nueva. Se llevan filmadas 21 películas del personaje creado por el novelista inglés Ian Fleming en 1952. Así, desde 1962 a 2008, James Bond ha pisado el set con diferentes intérpretes. Más acá en el tiempo, el personaje que vio cómo se retomaban sus disparates es Jason con once entregas en 20 años. Y la lista continúa.
Aún más oscuro. La reaparición del Hombre-murciélago en el cine y en la piel de Michael Keaton data de 1989, ya con el aspecto oscuro que le imprimiera Tim Burton más acorde con tiempos más violentos que los tintes pop del “Batman” del filme de 1966 con Adam West, el mismo protagonista de la famosa serie televisiva. Le siguió “Batman vuelve” (1992) con la misma dupla Burton-Keaton.
Vino luego la serie menos preciada con Joel Schumacher al mando. “Batman eternamente” (1995) con Val Kilmer aún contó con la producción de Burton, pero la situación se tornó difícil con un George Clooney rechazado por los fans en “Batman y Robin” (1997). El corolario fue la cancelación del proyecto en 1999 de “Batman triunfante”, con los mismos nombres.
Allí apareció Christopher Nolan que se hizo cargo de las últimas tres películas con Christian Bale como Bruce Wayne: “Batman inicia” (2005), “Batman: el caballero de la noche” (2008) y “Batman: el caballero de la noche asciende” (2012).
En busca del anillo. Las dos partes de “El hobbit” son en verdad una precuela, se llamarán “Un viaje inesperado” y “Partida y regreso” y están basadas en una novela publicada en 1937 que adelanta el universo creado por el escritor británico J.R.R. Tolkien para su obra más celebrada, “El señor de los anillos”. Esta última historia fue llevada al cine por el director Peter Jackson en tres partes: “La comunidad del anillo” (2001), “Las dos torres” (2002) y “El retorno del rey” (2003). Al descomunal éxito comercial se sumó un reconocimiento de la industria que le otorgó 17 premios Oscar. ¿El secreto? Una novedosa estrategia de producción que llevó a hacer los tres filmes juntos en Nueva Zelanda. De allí las dos entregas de “El hobbit” (2013 y 2014) con Jackson a la cabeza peleando contra la falta de presupuesto y las actuaciones de Ian McKellen y Andy Serkis del elenco anterior, más Ron Perlman y Martin Freeman.
Con telarañas. Todavía está en postproducción “El sorprendente Hombre araña” y ya Sony Pictures anunció una segunda parte. Está inspirada en el último dibujo animado para TV sobre el personaje creado en 1962 por Marvel Comics que se estrenó en 2008 y que se ve actualmente por Cartoon Network. Esta también será una precuela porque se remonta a la adolescencia de Peter Parker y lo sitúa en su escuela secundaria. Le precedieron a esta producción las tres partes de “Hombre Araña” (2002, 2004 y 2007) con Sam Raimi en la dirección y Tobey Maguire como protagonista, y un fallido intento en 1977 de un filme para TV que se llegó a ver en el cine dirigida por E. W. Swackhammer con Nicholas Hammond como el arácnido.
De vampiros. Adaptación de la novela de varios capítulos “Crepúsculo”, escrita por la estadounidense Stephenie Meyer, en 2008 el filme fantástico homónimo sobre vampiros adolescentes prendió la mecha. Rápidamente Kristen Stewart y Robert Pattinson, los protagonistas de la mencionada “Crepúsculo”, “Luna nueva” (2009) y “Eclipse” (2010), se transformaron en íconos de veneración teen. Aprovechando semejante impulso se prevé la cuarta y quinta parte de la saga, cuando los vampiros forman familia, lleguen a los cines el 18 de noviembre de 2011 y el 16 de noviembre de 2012.
Del cielo al agua. Después de la superpoducción “Titanic” (1997), James Cameron no se achicó y encaró el proyecto “Avatar” (2009), un filme que aunó las aventuras que tanto seducen a Hollywood con la más alta tecnología digital asociada al, en ese momento, recién arribado al cine masivo formato 3D. En la segunda parte el director vuelve sobre sus pasos y sitúa la acción ya no en los cielos del planeta Pandora, sino en sus océanos al estilo de “El secreto del abismo” (1989). La tercera aún no tiene guión definitivo, pero sí fecha de estreno.
Viaje al pasado. La tercera parte de “Hombres de negro” llega bastante después de las anteriores. Rodadas en 1997 y 2000 por Barry Sonnenfeld, la historia giraba en torno a agentes secretos que velaban por la convivencia de los humanos con los extraterrestres en la Tierra. Con el mismo director, Will Smith volverá a su personaje, al contrario de Tommy Lee Jones. Con la excusa de que Smith viaja al pasado, se encontrará allí con su compañero, pero más joven. Josh Brolin reemplazará a Jones, en una batalla contra una amenaza alienígena.
Un gran adversario. La secuela de “Sherlock Holmes” (2009) con idéntico director y elenco llevará el subtítulo “El juego de las sombras” e intentará reproducir las buenas dosis de aventuras y dividendos exhibidas por aquel. En esta oportunidad el famoso investigador y su ayudante, el doctor Watson, vuelven a unir sus fuerzas para enfrentar a un difícil adversario, el profesor Moriarty.
Con un circo. DreamWorks Animation acertó en 2005 con “Madagascar”, un divertido relato sobre un grupo de animales que tuvo su replay en 2008 y que esta vez deambula por Europa integrado a un circo con el propósito de regresar al zoológico de Nueva York.
Engañar a La Parca. La quinta de las películas de “Destino final” pretende salir de la pozo argumentativo que sufrió la saga. A un buen primer filme de terror de 2000 sobre un grupo de jóvenes que espera engañar a La Muerte le continuaron otros de 2003, 2006 y 2009 con la misma tónica. La moda de las precuelas alcanzó a esta serie con tanto brío que ya se anuncia la filmación de una sexta.
La gran renovación. Sin dudas que “Indiana Jones: En busca del arca perdida” (1981) fue una lisa y llana renovación del cine de aventuras. Luego vinieron “El templo de la perdición” (1984) y “La última cruzada” (1989). Y si bien “El reino de la calavera de cristal” (2008) no conformó ni a los fans ni a las taquillas, el productor George Lucas anda sacudiendo el fantasma de la continuación. Nadie le pone la firma ni comenzó la preproducción pero ya estarían apalabrados Harrison Ford y Shia LaBeouf, quien a partir de ahora y como el hijo del profesor Jones sería el protagonista.