Échale la culpa a un exceso de realismo: tras la última entrega de
'La saga Crepúsculo', el actor más vampírico y la actriz
más sensible forman un matrimonio ante Dios.
ViaVia: robstenyedwella
Dicen que nunca fueron pareja, y que en el fondo se llevan fatal. Pero Robert Pattinson y Kristen Stewart parecen esforzarse mucho para desmentir ambos rumores. No es sólo que (según informa Movieweb) el actor y la actriz de La saga Crepúsculo estén preparando una nueva, y romántica, película juntos, sino que además Pattinson ha confesado que ambos están casados. No se trata de que hayan decidido llevar el romance vampírico de sus personajes en la vida real, sino de un pequeño incidente por culpa de un exceso de realismo en el rodaje deAmanecer.
Según el intérprete de Edward Cullen, el director de Amanecer Bill Condon quiso que la boda entre el vampiró y su amada humana fuese lo más verosímil posible. De modo que, además de agenciarle a Bella un vestido nupcial que ya lo quisieran en Pronovias, el cineasta procuró que la boda de los personajes la oficiara un auténtico sacerdote, el cual ofició la ceremonia como si de un auténtico enlace se tratara. "Así pues, Kristen y yo estamos técnicamente casados, porque el cura lo hizo todo según el ritual", prosiguió Pattinson.
Sin embargo, los y las fans de Crepúsculo que aún sueñen con suplantar a Bella Swan pueden estar tranquilos. Acto seguido, Pattinson puntualizó que "aunque a los ojos de la Iglesia seguramente sí estaremos casados", no ha lugar a hablar de un matrimonio puesto que no se realizó la correspondiente ceremonia civil. Kristen Stewart, por su parte, ha detallado para Entertainment Weekly que, con boda o sin ella, el realismo prosiguió a la hora de rodar la noche de bodas. "Nos pasamos muchísmo de rosca, era como '¡Bella, qué estás haciendo!", comentó Stewart jocosamente.
Pero más vale que te olvides de ver dichos excesos carnales en la película, cuando esta se estrene en cines el 18 de noviembre. "El primer montaje se llevó una calificación 'R' [para mayores de 16 años], así que hubo que cambiar la escena", explica. Al final, va a haber que hacerles caso a Nikki Reed y Jackson Rathbone cuando nos comentaron que, en el fin de rodaje de la saga, hubo pocas lágrimas pero muchos copazos.
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